Alboraya como un pueblo tradicionalmente cristiano que es, tiene en la festividad de la Inmaculada Concepción uno de los días más importantes dentro de su calendario litúrgico. Antiguamente el día de la Inmaculada era día grande en todo el pueblo, aunque ahora con el paso de los tiempos esta festividad se ha reducido a la celebración de la misa solemne el 8 de diciembre con un templo repleto de fieles que acompañan a las clavarias encargadas cada año de la organización de la fiesta y su celebración.